Los wearables para el cuidado de la salud, un sector en auge
- Movilidad
Las ventas de dispositivos que monitorizan la actividad deportiva, física y de bienestar de los usuarios registrarán un aumento en los próximos años, sobrepasando los 10.0000 millones de dólares en 2022.
Actualmente, el sector de los wearables para el cuidado de la salud representa aproximadamente una cuarta parte del total del mercado de este tipo de dispositivos; es decir, unos 6.800 millones de dólares de un global de 25.000 millones de dólares, según los datos que maneja la consultora ABI Research. Sin embargo, este mercado todavía no ha tocado techo. La consultora estima que estos productos superarán los 10.000 millones de dólares en 2022.
En este ámbito, los wearables que monitorizan las condiciones de salud, el rendimiento físico y la actividad cerebral se moverán más allá de los relojes inteligentes y las pulseras de fitness. Y a diferencia de los dispositivos voluminosos relacionados con la salud de hoy en día, los sensores ultra-delgados y ultra blandos con análisis de software hacen que los wearables de próxima generación sean más inteligentes y útiles.
Tal y como explica Marina Lu, analista de ABI Research, “los sensores flexibles usados en el cuerpo son una innovación para la adopción de wearables en la asistencia sanitaria, el fitness y la interfaz hombre-máquina. Estos sensores pueden ser integrados en un pequeño parche y unidos a la superficie de la piel humana para rastrear señales vitales y otros datos biométricos de forma continua e inalámbrica. Algunos de los ejemplos de implementación incluyen tatuajes electrónicos y sensores de sudor de la piel”, asegura.
Por ejemplo, el tatuaje electrónico desarrollado por Rotex realiza muchas de las funciones típicas de los relojes inteligentes y pulseras de fitness. No sólo supervisa las condiciones de salud en tiempo real, sino que también proporciona un medio diferente para controlar los dispositivos como parte integral de IoT. Por su parte, los sensores de sudor no invasivos pueden medir un conjunto de datos biométricos clave de una sola gota de sudor. Algunas compañías ya trabajan en ello como Eccrine System, GraphWear Technologies y Kenzen.
“Los sensores de salud están cada vez más mercantilizados, ya que permiten una monitorización física continua con una intervención manual reducida y a bajo coste”, añade Lu. “Mientras que los sensores de salud miniaturizados permiten a los consumidores supervisar las condiciones de salud por sí mismos y ser conscientes de su propia evolución, también se extienden al mercado empresarial mediante la prestación de análisis superior para la investigación clínica y médica”, concluye.